El ancestral Camino Inca hacia Machu Picchu se ha consolidado entre los mejores recorridos del planeta, según la revista Time Out. Con una extensión aproximada de 43 kilómetros, este sendero combina historia, aventura y naturaleza, convirtiéndose en una experiencia única para los amantes del trekking. El recorrido, que dura alrededor de cuatro días, permite explorar los imponentes paisajes de los Andes peruanos, donde cada paso revela parte del legado del antiguo Imperio Inca.
A lo largo del trayecto, los caminantes pueden maravillarse con importantes sitios arqueológicos como Llactapata, Runkurakay, Sayacmarca, Phuyupatamarca y Wiñaywayna, todos rodeados de montañas cubiertas de neblina y vegetación exuberante. El punto culminante llega en la Puerta del Sol (Inti Punku), desde donde se aprecia por primera vez la majestuosa silueta de Machu Picchu, uno de los destinos más emblemáticos del mundo. Esta combinación de historia y belleza natural ha hecho del Camino Inca un símbolo del turismo cultural y ecológico del Perú.
Los excursionistas deben enfrentar tramos exigentes como el Paso de la Mujer Muerta, una subida que requiere resistencia y preparación previa. No obstante, quienes logran superarla son recompensados con vistas impresionantes del paisaje andino y la emoción indescriptible de arribar a la ciudadela inca. Por ello, expertos recomiendan estar en buena condición física y aclimatarse antes de iniciar la travesía.

En cuanto a los costos, la página oficial Boletos Machu Picchu indica que la caminata completa de cuatro días tiene un precio entre US$580 y US$600, dependiendo del tipo de visitante. Este monto incluye permisos, ingreso al santuario histórico y servicios de guía autorizados. Para quienes prefieren una versión más corta de dos días, el costo oscila entre US$480 y US$500, ofreciendo igualmente una experiencia inolvidable en contacto directo con la naturaleza y la historia.
La revista Time Out también recomienda reservar con anticipación, ya que los cupos son limitados y suelen agotarse con rapidez. Asimismo, se sugiere portar pasaporte durante todo el trayecto, visitar entre mayo y septiembre, y tomar precauciones frente al mal de altura. Contar con buena preparación física y dispositivos de energía resulta esencial, pues gran parte del recorrido atraviesa zonas remotas sin acceso a señal telefónica o electricidad.
Finalmente, el Qhapaq Ñan, nombre original en quechua que significa “camino principal” o “camino del poderoso”, fue construido en gran parte bajo el mandato del emperador Pachacútec en el siglo XV. Esta red monumental unía vastas regiones del Tahuantinsuyo, y su conservación actual representa un testimonio vivo de la ingeniería, la cosmovisión y el legado cultural del antiguo Perú.




