La recta final del año llega acompañada de celebraciones, reuniones y eventos especiales que se extienden hasta Año Nuevo. En ese contexto, el peinado se convierte en una pieza clave del look, no solo por estética, sino por su capacidad de mantenerse intacto durante largas jornadas de fiesta.
Según el Estudio Global del Cabello de Dyson, el 70 % de las personas percibe algún nivel de daño capilar, una cifra que refuerza la importancia de evitar el calor extremo y optar por rutinas que prioricen la salud del cabello. En climas húmedos y cálidos, el reto es lograr estilos duraderos, con estructura y movimiento, sin recurrir a técnicas agresivas.
El liso pulido sin frizz, también conocido como glass hair, es uno de los looks más sofisticados de la temporada. Su acabado brillante y recto, con raya marcada al centro o lateral, lo convierte en una opción elegante para cenas formales y eventos nocturnos, aportando una imagen limpia y de alto impacto.
Los rizos definidos con volumen controlado representan el equilibrio perfecto entre textura y elegancia. Este estilo glam moderno resalta la forma natural del cabello rizado, aporta presencia y se mantiene firme incluso en ambientes húmedos, ideal para quienes buscan un look poderoso y festivo.
Las ondas suaves siguen siendo un clásico versátil para las celebraciones de fin de año. Funcionan tanto en reuniones familiares como en eventos semi formales, gracias a su acabado romántico, luminoso y natural, que aporta movimiento sin rigidez y se adapta a distintos estilos.
El blowout voluminoso, con elevación en la coronilla y puntas pulidas, se posiciona como una de las tendencias más fuertes de la temporada. Inspirado en looks de celebridades, este peinado aporta cuerpo, dinamismo y un acabado profesional, perfecto para destacar en fiestas y celebraciones prolongadas.
